Los terremotos de Santa Marta marcaron a todo un país, siendo una de las catástrofes naturales más fuertes en toda la historia de Guatemala. Una ciudad que quedó en ruinas, con sus habitantes al borde de la desesperación y dos bandos que discutían sobre si trasladar la ciudad o no; estos son los puntos más llamativos de este suceso. A continuación, estaremos repasando todo lo sucedido en Julio de 1773 en Santa Marta, Guatemala.
¿Qué sucedió en los terremotos de Santa Marta en 1773?
A finales de Julio, durante el año 1773, ocurrió uno de los sismos más fuertes que se han registrado en el país. Ocurrió en Santa Marta, un terremoto que sacudió la ciudad por más de un minuto, dejando a sus habitantes asustados, preocupados y angustiados por lo que podría pasar con sus vidas.
El terremoto no perdonó estructuras, por muy importantes que fueran, terminó derrumbando monumentos, iglesias, edificios gubernamentales y mucho más. Su paso fue devastador, dejando una ciudad en ruinas, los habitantes que habían sobrevivido a la situación no sabían que podría deparar en un futuro.
La ciudad estaba destruida y los suministros se estaban agotando, puesto que, quienes abastecían la ciudad huyeron al vivir el terremoto.
El grado del terremoto fue de 7.5, según las estimaciones oficiales, ya que, por la época no podemos tener datos exactos. Un detalle a destacar es que este terremoto trajo réplicas por lo menos 6 meses más de sismos en menor medida. Inclusive antes del gran terremoto se había registrado actividad pero muy leve que no terminó por alertar a los habitantes de Santa Marta.
Tras ver los daños que había ocasionado el sismo y el peligro que era habitar esa zona debido a su riesgo sísmico, el presidente de la audiencia Martin de Mayorga solicitó la mudanza de la ciudad a un punto más seguro. Pero, había quienes por amor o esperanza permanecían firmes ante su postura de dejar la ciudad donde estaba, este movimiento era liderado por Pedro Cortés, arzobispo en ese entonces.
Finalmente, Santa Marta fue mudada al Valle de La Ermita, esta decisión fue tomada en enero del año 1774. Un punto de inflexión fue la actividad sísmica que se vio en diciembre de 1773, que terminó por encaminar la decisión de mudar la ciudad. Hubo quienes permanecieron en la ciudad, por temor a que esta muriera.
¿Cómo fue el después tras los terremotos de 1773?
Como repasamos previamente, el impacto de los terremotos en 1773 fue brutal, con daños tanto a personas como a estructuras. A pesar de ello, la vida debía continuar y los guatemaltecos no bajaron los brazos, lograron salir de la situación con la frente en alto y un esfuerzo notable para conservar la ciudad.
A día de hoy, Santa Marta ( la actual Antigua Guatemala) es un lugar turístico, tanto para locales como extranjeros, que deseen apreciar lo que queda de aquella ciudad. Es interesante ver las ruinas de iglesias y edificios importantes, pero también es una huella que no se borrará de la historia y el recuerdo de sus habitantes.
Un dato curioso de este acontecimiento fue que Matías de Gálvez solicitó que lo que quedaba de ciudad fuera demolido, ordenes que no se siguieron por completo. Gracias a esta negación es que podemos ver un trozo de la historia guatemalteca aún de pie. Un evento histórico, con consecuencias negativas, pero, que todos los habitantes del país guardan como prueba de que no todo está perdido.
